Prácticas clínicas sencillas como la higiene de manos pueden evitar los efectos adversos ocasionados en el ámbito sanitario, que ascienden a 9,3 por mil, y se pueden prevenir el 43 por cien de los casos.
Así se ha puesto de manifiesto en la IV Conferencia Internacional de Seguridad del Paciente.
Según el Estudio Nacional de Efectos Adversos (ENEAS), promovido por el Ministerio de Sanidad en 2006, la incidencia de efectos adversos relacionados con la asistencia hospitalaria es del 9,3 por cien, de los que casi el 43 por cien serían evitables.
En Atención Primaria, el informe APEAS, realizado en 2007 en 48 centros de salud de distintas comunidades autónomas, refleja que la frecuencia de efectos adversos es de 11,2 por mil y se pueden prevenir el 70 por cien.
Entre las acciones a llevar a cabo figuran la higiene de manos como el mejor método para prevenir las infecciones; la identificación inequívoca de los pacientes ingresados y la aplicación de prácticas clínicas recomendadas para la prevención de efectos adversos asociados al uso de medicamentos o la infección asociada al cuidado sanitario, entre otros.
Web con información de interés
El Ministerio de Salud ha desarrollado Excelencia clínica, un metabuscador de información sobre evidencia en salud, en castellano e inglés y la web Seguridad del paciente para proteger la práctica clínica.